VOLVER A EMPEZAR

Por enésima vez (y sin que sirva de precedente) desde hace 3 años, mis tareas deportivas, o sea correr, es un arrancar y parar y es que cuando no es la hernia discal, es el gemelo y así voy, pero bueno, me voy adaptando y esperando una temporada de continuidad y poder correr alguna carrera de forma regular.
Este verano ha sido movidito, en julio estuve todo el mes parado por una fuerte ciática que me llevó incluso a inyectarme dos cajitas de corticoides y gracias a ellas y a mi trabajo dos días por semana en el Instituto de la Columna pude recuperar. Llegó agosto, los calores y por fin poder correr, pero poco duró porque a las dos semanas el gemelo se cargó de una forma brutal y no me dejaba correr más de 20 minutos, así que parón de casi un mes. Con descanso y sesiones de fisioterapia, PARECE que ha desaparecido y el sábado probé y pude correr 38 minutos y terminé bien, sin molestias ni sobrecargas por lo que ayer lunes volví a trotar unos 35 minutos y creo que la recuperación es una realidad, así que aplicaré la prudencia como máxima prioridad y saldré en días alternos hasta que vea que me encuentro cogiendo la forma y la confianza, porque tanta lesión merma la moral. Seguiré contando mis progresos.